UN LLAMADO QUE ROMPIO LA CALMA
El miércoles pasado con la quietud que generó el censo y la noticia de la muerte de Néstor Kirchner, el día transcurría tranquilo en la Comisaría del Menor de Villa Mercedes. Sin embargo en horas de la siesta un llamado al 911 alertó sobre la presencia de un menor en soledad en pleno centro de la ciudad.
El móvil conducido por el oficial Sánchez se hizo presente en el lugar para constatar el hecho increíble: un indefenso nene de 3 años solo a punto de bajar a la calle y sin ningún mayor que lo acompañe. Inmediatamente y ante el asombro de la propia policía se dio a conocer el caso a la Comisaría del Menor para que tomara cartas en el asunto. El angustiado niño fue trasladado a esta dependencia y en el acto se hizo presente el Doctor Jorge Rudi, Jefe del Programa de Asistencia a las Víctimas Vulnerables. La comunicación del caso para el prestigioso pediatra, partió en el momento justo desde el Ministerio de Seguridad que dirige la Doctora Berta Arenas.
El menor comenzó a ser revisado por Rudi quien para estos casos maneja un protocolo de avanzada en donde se respeta la integridad del niño tratando de hacer del proceso un momento lo menos invasivo posible. Luego de revisarlo la conclusión fue que no tenía ningún tipo de rastros de violencia o abuso y junto a las asistentes sociales que trabajan en la Comisaría del Menor se comenzó a elaborar la contención psicológica para el pequeño de tres años quien al principio se mostró distante pero luego se acomodó a la difícil situación que le tocaba vivir.
EL REENCUENTRO Y LUEGO EL SEGUIMIENTO
Mientras tanto, el personal de la dependencia se abocaba a la búsqueda de la madre que luego de un par de horas llegó para reencontrarse con su hijo.
"Fue muy importante que estuviéramos atentos a este momento ya que si el niño se negaba o rechazaba a la madre hubiera sido un signo de que algo raro estaba pasando en esa relación", contó Jorge Rudi. El contacto entre madre e hijo fue entre llantos mezcla de nervios y emoción y no hubo ninguna señal de disconformidad por parte del menor. La madre lo primero que dijo fue "Te estaba buscando".
Con el correr de los minutos fue indagada por el personal policial y una de las asistentes sociales que presta tareas en esa dependencia. Allí se enteraron que el niño había sido dejado por la madre de una edad cercana a los 40 años, en casa de su abuela quien mientras dormía la siesta lo dejó solo.
Tanto las asistentes sociales como Rudi consideraron que ambos podían volver a su domicilio aunque del trabajo del personal no terminó allí ya que el programa dirigido por el médico, realizó un seguimiento de la familia involucrada en el doloroso hecho: a las 10 de la noche un móvil policial fue a constatar las condiciones en que se encontraban los protagonistas de esta historia junto a una de las asistentes sociales y lo mismo hicieron el jueves por la mañana.
Fue una historia con un principio muy triste pero con final feliz gracias a la intervención de organismos del estado provincial que evitaron lo que podría haber sido un niño robado o atropellado en la vía pública. Una historia que debería servir para despertar la responsabilidad de los padres en el accionar diario para con sus hijos.
Lo que viene después para el nene
"ESTO ES UNA MARCA QUE NO SE LE VA MAS"
Consultada una Licenciada en Psicología recibida en la Universidad de San Luis perteneciente al Programa de Asistencia a las Víctimas Vulnerables, dijo que esto que le ocurrió al nene "No se va nunca más es una marca que no se te va nunca, es una sensación de miedo intenso y desprotección ya que los padres son quienes brindan las condiciones básicas y cuando no están hay una sensación de vulnerabilidad total".
Además agregó que "esto seguramente va a influenciar en futuras conductas ya que va directamente dirigido a la personalidad en su manera de pensar sentir y actuar porque ante cualquier situación que active esa parte emocional que sintió en ese momento, va a recordar esa desprotección y más allá de que el ser humano se adapta seguramente las primeras reacciones van a ser de abandono".
Por otro lado, Arenas comentó que la personalidad de estas personas se ve influenciada por este tipo de hechos al punto tal que "necesitan de contención de manera constante y ante una abandono ya se a de su futura pareja, de la pérdida de algún familiar, etc, no saben que hacer, se paralizan y buscan apegarse a alguien"
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